Canción de cuna

Tu no tienes la culpa mi amor que el mundo sea tan feo.

Tu no tienes la culpa mi amor de tanto tiroteo.

Va por la calle llorando; lágrimas de oro....

Va por la calle brotando; lágrimas de oro.

No María, ni tú tampoc Lluiset, ni Carla, ni Alba, Pol, Iker, Pol, Pol, ni Teo, Úrsula, Mo-e (cuantos pols que se hacen ultimamente). Ninguno de vosotros tendréis la culpa del mundo que encontraréis. Cuando nosotros crecíamos nadie sabía que era el calentamiento global, incluso algunos hablaban de que en el año 2000 la Ciencia habría solucionado los males de la humanidad. Se esperaba que los derechos humanos llegasen hasta cualquier punto del planeta y ninguno de nosotros viviríamos desastres como la segunda Guerra Mundial, guerras civiles, ni veríamos escenas como las de Eritrea o Bangladesh a principios de los setenta. Esas eran las bonitas palabras de vuestros abuelos.

Hoy en día el panorama parece desolador: guerras, hambre, dolor, odio, deforestación, animales extintos....Sin duda las siete plagas se han apoderado del planeta y visto desde "fuera" nada parece preveer un futuro mejor. Así que no sería nada sorprendente que un día preguntarais que mierda de mundo os fabricamos. Muchos juguetes, televisiones, redes, wifis...pero rodeados de hambre, miseria y miedos. Parece que la segunda generación que ha dispuesto de ciencia y posibilidades para hacer ALGO también hemos fracasado

Creo que no es así, el mero hecho de "fabricar" una nueva vida, en la mayoría de los casos que conozco, no se debe al mero hecho de seguir un tradición cultural y social, sino a una insospechada Fe en un futuro mejor. Si no, ¿Por qué iban a legar a las personas que más quieren un mundo hostil y negro?.

Visto desde cerca, rascando y fijándonos un poco, encontraréis un montón de gente que se están dejando los cuernos en preparar, reparar y desear un mundo mejor. Gente que no sale en los periódicos ni en televisión. Gente que no escribe libros ni blogs ni nada de nada....sencillamente trabajan y trabajan sin asustarse ni desanimarse al comprobar que su pequeño grando de arena apenas inclina la balanza de la Justicia....Pero tened fe enanos y aprended de nuestros errores, porqué yo os puedo jurar que esta gente existe: los he visto.