Todos me decían: ¿Cómo se te ocurre visitar un país islámico en pleno Ramadan y en verano?. No había caído que estos días coinciden con esa festividad del ayuno, pero después de pensarlo un rato, creo que debo estar agradecido a mis dioses por concederme la oportunidad de presenciar esta fiesta en directo.
Me gusta estar presente cuando el ser humano no se avergüenza de creer en algo. Visitar países donde la religión forme parte del orden natural de los acontecimientos cotidianos; me hace sentir más puro y libre. Siento que el que está lleno de dudas y prejuicios soy yo, el occidental racional y descreído. Ellos, ya sean budistas, hindús o musulmanes, no esconden que creen en algo, que su fe, personal e intransferible, es una especie de motor que les guía en el quehacer diario. Que procuran apaciguar sus dudas con unas creencias que aquí consideramos fuera de lugar.... una fe personal, alejada de las dictaduras que impone cualquier tipo de Iglesia.
Aqui en Europa disfrazamos las cosas , tal vez para no tener que avergonzarnos de las dudas que nos corroen. Aceptamos tener fiesta los domingos como algo natural, sin saber que cumplimos un precepto judeo cristiano,... y pobre del que nos lo niegue. Aceptamos con perfecta naturalidad las fiestas navideñas y organizamos reuniones donde comemos y reímos sin saber de que nos reímos o por qué comemos tanto, pero a todos nos importa una mierda que hizo ese tal Jesús un doce de agosto o un seis de noviembre. Incitamos a los niños a creer en los reyes magos, propagamos nuestra falsa fe.... mientras, nos quejamos de que el estado da subvenciones para tales escuelas o tales religiones. Aceptamos las fiestas de semana santa, pero ni se nos pasa por la cabeza revivir el martirio de ese hombre. Somos así, ya no nos gusta pensar ni dudar de nada. Todo tiene su ordenamiento y su razón lógica, y sino, nos la inventamos, que coño. Por lo menos, puedo entender que el ayuno del Ramadan y su consiguiente fiesta, ellos la llaman La fiesta del ayuno, les ayuda a acercarse a su dios.
Cuando visitas un país, "atrasado"según nuestro parecer, pensamos que Ellos, "pobretes", les falta cultura, iluminación y razón. Esgrimimos como arma académica todos los defectos que tiene ese seguimiento de fe sin pararnos a pensar ni un sólo segundo las ventajas que conlleva tener algún tipo de fe.
Si han de rezar cinco veces, si se debe hacer una puja por la mañana, si alguien cree que es necesario recitar 108 veces el Om mani padme om.... es que debe ser tan necesario como hartarse de turrones o regalarle algo al primo que odias desde pequeño, o mas...., pero yo veo mucho más feliz a un musulmán ayunando, que a un cristiano compartiendo mesa en navidad con alguien a quien no soporta. Veo más feliz a un famélico hindú bañándose en el Ganges o a un monje budista en silencio que a la mayoría de gente que habita a mi alrededor, entonces, ¿por qué banalizamos sus actos? Tenemos miedo a dudar de nuestra razón, o con la tdt y el dólar ya tenemos suficiente?
El ramadan es una fiesta, una tradición con la cual se acercan a sus creencias; Supongo que depende de la forma en que mires a tu alrededor, creo que soy un tipo con suerte de poder compartir, aunque sea sin creer, pues a mi me tiran mas las vacas sagradas, de poder compartir estos días de fiesta y ayuno con ellos; Oír al muhecin cantar y apresurarnos a buscar sitio para comer, pues de otro modo los camareros y cocineros no te sirven,.... y aun veo turistas que se enfadan por este motivo. Da mucha risa ver al camarero comiendo y al cliente mirar con hambre, esperando que este acabe; La fe por encima del negocio, vale la pena que aun existan gente así...
PD: el teclado arabico es bien bien complicado, así que no espereis mucho mas....