3/1/07

Las miradas de María...


¿ Cómo empezar?. Prometí escribir algo más acerca de una princesa. Hace un tiempo completé un círculo íntimo; había visitado los suelos de las cinco grandes religiones. Pensé en la tontería, en si había valido la pena...si tal vez era un poco menos estúpido.
.Creí que si tras dormir y comer en un país musulmán en el año 1432, celebrar el año nuevo budista en el 2545 junto con millones de personas en Thail., si por reír y fumar en Tel-Aviv en el año 5542 o por ahí, que amé en un lugar donde ya no se molestan en contar los años pues perdieron la cuenta... que hace tres días la gente celebró a mi alrededor el 2007, y que en pocos días, viviré en una cultura que el 13 de Agosto celebró su año nuevo número 5121...pensé que todo eso me daba un plus de experiencia...error.
Todo cambió hace dos veranos cuando vi la mirada de la pequeña María, de apenas tres años de edad. Estaba yo halagándola, intentando hacerla sonreír, cuando sus bonitos ojos se clavaron en mi y una sonrisa que no me era del todo desconocida apareció en su rostro. -"No facis el tonto joan".
Demasiadas veces he visto esa sonrisa en mujeres hechas y derechas; israelitas, barcelonesas, gaditanas, italianas, malagueñas... valencianas. Una mirada que vi por última vez en Kolkata, mientras el mediterráneo me observaba con una media sonrisa... Una sonrisa y una mirada curada de espantos, a prueba de lisonjas baratas y previsibles adulaciones. Una sonrisa que decía...hombres...
Una mirada mediterránea. Comprendí que María había cumplido 3000 años sin apenas proponérselo. Un gesto lleno de sabiduría y comprensión: divertida ante el esfuerzo del torpe por hacerla sonreír, tal vez algo hastiada ante la pesadez de los hombres. Una sonrisa heredada de miles de mujeres mediterráneas que a lo largo de la historia han visto como los hombres se volvían codiciosos, desaparecían en busca de guerras incomprensibles o se llenaban la boca con palabras como honor, orgullo y patria, mientras ellas sufrían su particular guerra diaria: sustentar el hogar, criar a los hijos, poner cordura, enviudar en silencio. Una mirada cansada, de mujeres enlutadas mirando el horizonte de un mar que pocas veces devolvía a esos "aventureros", la fatal resignación. Esperar. Una mirada capaz de convertir un ratón en león, un león en gusano, un gusano en mariposa...Comprendí que hay miradas y expresiones que provienen de la tierra, de la historia. Miradas en las que poco importa su color : si negro azabache, verde intenso, azul impenetrable o cálida miel. Miradas que no necesitan aprender, ni que la vida las marque de una manera cruel en su rostro.
Comprendí que mientras a ella tan sólo le falta crecer en altura, al hombre le toca madurar. Comprendí porqué algunas mujeres ya son sabias sin proponérselo, porqué son inmunes al halago o pacientes ante la estupidez...Mujeres mediterráneas...esto también lo echaré de menos...
Huir el rostro al claro desengaño,
beber veneno por licor suave,
olvidar el probecho, amar el daño;
creer que un cielo en un infierno cabe,
dar la vida y el alma a un desengaño;
esto es el amor, quien lo probó lo sabe.
D.Lope de Vega y Carpio

3 comentarios:

  1. Un beso para Maria y procura que cuando sea mayor, tenga la posibilidad de leer tu escrito.
    Seria muy bonito para ella.

    LOVE

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  2. Es preciós. Li agradarà llegir-ho quan en sàpiga. M'hagués agradat que algú hagués escrit alguna cosa la meitat de maca sobre mi. Gràcies
    Núria

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  3. bueno no tiene nada que ver con este articulo pero era para desearte un buen viaje y que toda salga bien donde vas que la verdad no me acuerdo donde era un abrazo y espero leer noticias de ves en cuando saludos desde el lokutorio

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