26/3/08

Diferencias?.... so, so, ...



Entrar en un templo budista es un placer para los sentido físicos, y para algunos afortunados, también sensoriales. Las delicadas tallas de madera que decoran vigas y contrafuertes causan admiración e invitan a ser observadas con detenimiento. La estupa dorada que corona la cúpula. Los increíbles y detallados murales que adornan sus paredes y el techo, relatan la vida de Buda, su peregrinaje y tentaciones y el alcance del nirvana. Numerosos grabados están remarcados con pan de oro. La exquisita pulcritud en cada esquina del recinto, las alfombras rojas en los costados preparadas para sentarse, meditar o aprender... El gran o pequeño buda, a veces si que les importa el tamaño, que preside la sala, muchas veces intimida: tiene a sus pies, ofrendas florales, dinero, leche y arroz. A cada lado del buda se alinean en perfecto orden imagenes traídas de diferentes lugares por peregrinos, junto con viejos libros de mantras, cada cual mas antiguo, decorados con banderas y cintas de colores. Una perfección que recuerda el boato de grandes catedrales y mezquitas.
En el templo budista de Bodhgaya, has de entrar descalzo y limpiarte los pies en la alfombra de la entrada. Has de circular en sentido de las agujas del reloj, no puedes tocar las flores del jardín ni acercarte mucho a los murales. No puedes hablar fuerte, no fumes, ni fuera en el jardín, no juegues....
Justo al lado de este templo, se alza un antiguo templo de Shiva, la gran deidad hindú. Es una covacha pequeña coronada por una estructura piramidal en cuyo centro se alza un tridente y una bandera roja desgastada y rota. Entrar es fácil, todo buen hindú estará encantado de mostrarte el templo y despejarte todos tus interrogantes. Dentro, hay un minúsculo habitáculo en cuyo interior puedo distinguir una cobra rodeando un lingam , simbolo falico que representa la creacion de Shiva, a sus pies hay flores frescas y tambien restos de petalos marchitados hace meses. Mantequilla derramada sobre el lingam, y muchos polvos de colores mezclados con agua y arroz parecen, solo parecen, ensuciarlo suelo, paredes y techo. Una enorme tela de araña en una esquina. Un poco a la derecha, hay un pequeño toro jorobado de piedra, es Nandi, el vehículo celestial de Shiva, a la izquierda esta su hijo Ganesh, gordo y con cabeza de elefante, detras se encuentra Hannuman, el dios mono y guerrero gran companyero de aventuras de Shiva. Shiva tiene mujer e hijos, es mujer y hombre a la vez, esta divorciado, fue asesinado por Kali, la negra, que disfruta bailando sobre su cadáver...., pero hay mas, justo en la entrada de la caverna, pero dentro del templo, media docena de críos están jugando criquet, la pelota rebota en las paredes y los chavales chillan, disfrutan, se pelean por la bola y ríen. Aparece un venerable anciano con sus tres rayas blancas en la frente, gran tika rojo y tunica blanca, simbolo de su alta casta. Sonriendo se acerca al grupo que jugamos y nos colorea la frente mientras recita el omm nama siva de costumbre, me pregunta si ya me han explicado todo lo que quiero saber, si quiero saber alguna cosa mas, si me apetece un chai.....
No se cual es la verdadera fe, ni si exista alguna como tal, un filosofo americano dijo que dios es real en la medida que provoca efectos reales en los actos de los hombres. No me extraña el poder tremendo que tiene Shiva y los otros dioses en este país: es un dios cercano y a la vez increíble, esta fuera de todo proselitismo, nunca en todos los viajes a India nadie me ha intentado convencer de nada. Es el destructor y creador, pero es fiel esposo y amante terrenal. Es divorciado, fumador de hachís, muere, vive, hiere y es herido, tanto en el corazón como en el cuerpo.... es hombre y mujer.. La fe en la India se mama desde pequeño, en todos los aspectos y actos cotidianos de la vida, y cuando son mayores, les es imposible desligar cultura, de tradicion.
Un escéptico como yo se refugia en las letras para comprender, y mira por donde que tengo un escrito del maestro Manuel Vicent a propósito de nuestros curas españoles que...., da que pensar y es aplicable en todo el planeta.....
Antes de que el niño llegue al uso de razón, su cerebro ya ha sido inoculado con todos los elementos fundamentales de los que no podrá desprenderse a lo largo de la vida. La papilla de cereales ira acompanyada de canciones de cuna que hablaran de ángeles celestiales, nubes blancas y dulces sueños, con palabras pronunciadas en una lengua que sera indeleble para siempre. Este es el primer ingrediente de la magdalena de Proust.
De las cuatro esquinas de la cama los ángeles saltaran al subconsciente de la criatura y enseguida llegara también la figura del demonio junto con el miedo a la oscuridad. El complejo de Edipo o de Electra comenzara a desarrollarse cuando un desconocido la tome en brazos y le pregunte a quien quiere mas, a papa o a mama, exigiendole una respuesta súbita.
El árbol de la ciencia del bien y del mal a cuya sombra germinara la inteligencia, esta lejos todavía. Durante los primeros siete años, el cerebro del niño se halla a merced de todas las sensaciones y con ellas la magdalena de Proust ira tomando condimento, forma y perfume. Las lecciones de catecismo, las caricias maternales, el pan de la alacena, las primeras advertencias del padre, el fuego del infierno, el aprender atarse los zapatos, el volteo de campanas, las primeras lágrimas, las banderas patrias, el himno del equipo de fútbol, el primer castigo, la historia sagrada, los escudos, el primer premio, el amor de los hermanos, la tarta de chocolate envuelta del primer cumplanyos, Dios propiamente dicho formando la magdalena de Proust que un dia lejano aparecera.
La iglesia, (todas), considera que este territorio le pertenece por derecho divino, no esta dispuesto a negociarlo con nadie y lo defiende a cara de perro contra el Estado. Aparte del negocio de la enseñanza, la iglesia, (todas), sabe muy bien que cualquier sensacion irracional que se acuñe en la virginidad de la consciencia se convertira en una marca imborrable. Cuando la inteligencia ocupe el cortex del cerebro y el individuo trate de desmontar todas las piezas que constituyen el espíritu, le sera imposible separar la razón de la creencia, la educación de la memoria.
A la iglesia, (todas), poco le importa lo que el niño haga a lo largo de su vida, porque esta segura de que en una tarde de melancolía le emergerá Dios dentro de la magdalena y al final, aunque solo sea como cadáver, espera que vuelva a su templo.
Manuel Vicent

Ah! Siva, en sánscrito, quiere decir felicidad, ahora estoy en la ciudad de Shiva, Varanasi, asi que, Siva para todos....